Aunque en Brasil se celebra el 29 de octubre, el día 23 de abril fue elegido por la UNESCO como Día Internacional del Libro, pues coincide con el fallecimiento de Miguel de Cervantes, William Shakespeare y Garcilaso de la Vega en la misma fecha del año 1616. Este día también fallecieron William Wordsworth (en 1850) y Josep Pla (en 1981). La Unión Internacional de Editores propuso esta fecha a la UNESCO, con el objetivo de fomentar la cultura y la protección de la propiedad intelectual por medio del derecho de autor. La Conferencia General de la UNESCO la aprobó en París el 15 de noviembre de 1995, e institucionalizó el 23 de abril como el "Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor".
En España
El Rey Alfonso XIII firmó un Real Decreto, el 6 de febrero de 1926, por el que se creaba oficialmente la Fiesta del Libro Español, que se celebraría en la fecha que entonces se creía que había nacido Cervantes, el 7 de octubre. La idea original fue del escritor valenciano Vicente Clavel Andrés, que la propuso a la Cámara Oficial del Libro de Barcelona, donde se aprueba en marzo de 1925, cuya celebración se instaura el día del nacimiento de Cervantes, y que coincidió aquel primer año con la Exposición del Libro Español en Buenos Aires. Poco después, en 1930, la UNESCO aprueba definitivamente la fecha del 23 de abril como Día del Libro.
La celebración arraigó especialmente en las ciudades universitarias. En el resto de regiones y ciudades no universitarias de España, por contra, la fiesta se mantenía con una repercusión escasa o incluso desaparecía. Sin embargo desde los años 80 del pasado siglo XX ha vuelto la tradición con fuerza, sobre todo en ciudades como Madrid o Valencia. En esta última ciudad se celebra la feria del libro cada mes de abril.
En España se realiza en esta fecha la entrega anual de los Premios Cervantes, el mayor galardón otorgado a los autores hispanos.
Cataluña
Es la comunidad española que celebra con más intensidad el Día del Libro. Se inició en la ciudad de Barcelona y se extendió por toda Cataluña, aunque la denominación oficial mudó con el tiempo, al coincidir con el día del santo patrón, convirtiéndose en la Diada de Sant Jordi (Dïa de San Jorge). Además se hizo tradicional en Cataluña el intercambio y regalo de rosas y libros entre parejas y personas queridas en dicha fecha, convirtiéndose en una de las jornadas populares más celebradas. Esta tradición fue uno de los argumentos utilizados por la UNESCO para declarar el 23 de abril Día Internacional del Libro.
La celebración arraigó especialmente en las ciudades universitarias. En el resto de regiones y ciudades no universitarias de España, por contra, la fiesta se mantenía con una repercusión escasa o incluso desaparecía. Sin embargo desde los años 80 del pasado siglo XX ha vuelto la tradición con fuerza, sobre todo en ciudades como Madrid o Valencia. En esta última ciudad se celebra la feria del libro cada mes de abril.
En España se realiza en esta fecha la entrega anual de los Premios Cervantes, el mayor galardón otorgado a los autores hispanos.
Cataluña
Es la comunidad española que celebra con más intensidad el Día del Libro. Se inició en la ciudad de Barcelona y se extendió por toda Cataluña, aunque la denominación oficial mudó con el tiempo, al coincidir con el día del santo patrón, convirtiéndose en la Diada de Sant Jordi (Dïa de San Jorge). Además se hizo tradicional en Cataluña el intercambio y regalo de rosas y libros entre parejas y personas queridas en dicha fecha, convirtiéndose en una de las jornadas populares más celebradas. Esta tradición fue uno de los argumentos utilizados por la UNESCO para declarar el 23 de abril Día Internacional del Libro.
Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%ADa_Internacional_del_Libro (adaptación).
